Dejando atrás las Navidades, y todo el protocolo que envuelve las fiestas, retomamos la rutina este enero con las principales Fashion Weeks. Menos mal que nos dan algo de alegría estética en este mes tan largo. No podemos pretender vivir cada año una investidura presidencial estadounidense y que Melania nos regale sus looks sabiendo que darán casi tanto que hablar como las decisiones de su marido. Pero en este 2025 tenemos ambas cosas así que tampoco podremos quejarnos demasiado.
Arranco 2025 con un proyecto que tenía muchas ganas de abordar. Hasta el momento, he colaborado con PersonalitIA en varios artículos más didácticos, con la intención de transmitir consejos y recomendaciones sobre distintos aspectos relacionados con la imagen.
Con este nuevo año, mis artículos serán más personales. PersonalitIA me cede un espacio en blanco llamado ‘Diario de asesora’, para que pueda transmitir mi visión sobre cómo la imagen está relacionada con el ámbito profesional o político pero también con campos como la moda o la comunicación.
En este primer artículo, no podía empezar de otra forma que con la toma de posesión de Donald Trump como 47º Presidente de Estados Unidos. Pero, más que con él, con su mujer, Melania Trump y cómo ha hecho de su imagen el símbolo de este acto de investidura presidencial.
Melania nos ha dejado grandes momentos estéticos en su anterior papel como Primera Dama, desde el atuendo colonial durante su visita al continente africano hasta su abrigo de Zara con el mensaje «Realmente no me importa, ¿a ti?» en la frontera con México.
Nada está dejado al azar. Melania domina como nadie la comunicación a través de su imagen, cultivando una apariencia hermética, y dejando que sea su atuendo y gestos los que comuniquen.
Durante el acto de investidura, Melania eligió llevar un look que no dejó indiferente a nadie. Combinaba un abrigo de corte militar y color oscuro con un sombrero que tiene varias lecturas. Si el acto no se celebraba al aire libre, no tenía sentido un sombrero para cubrirse del sol, por ejemplo. Pero sí el sombrero le permitía ocultar su mirada y dificultar las muestras de cariño. Una imagen fuerte, e impactante, que casi nos recuerda al Guy Fawkes de V de Vendetta.
Hoy nos encontramos con su foto oficial de Primera Dama, realizada un día después de la investidura. Creo que si pensamos en un sentimiento que nos transmite, ese puede ser poder. Al más puro estilo House of Cards, Melania posa con una actitud activa, vestida con un look sobrio y profesional, y con Washington a sus espaldas. No tengo pruebas, pero tampoco dudas, de que su papel irá mucho más allá de la Primera Dama tradicional.
Su chaqueta tipo esmoquin para la fotografía es de Dolce & Gabanna así que sería ideal ver una reconciliación entre el mundo de la moda y los Trump a través, por ejemplo, de su presencia en las Semanas de la Moda. Son muchos los feos que le ha hecho el mundo de la moda y, sinceramente, pocas mujeres utilizan de forma estratégica la ropa como lo hace ella. ¿La veremos en el próximo September Issue de la demócrata Anna Wintour?
Gema Díaz
Periodista de formación, Gema Díaz es especialista en Imagen Pública, Comunicación y Tecnología. Ha liderado departamentos de marketing y comunicación de distintas compañías tecnológicas en los últimos 10 años. Con un enfoque 360º, diseña estrategias de imagen sólidas, coherentes y sostenibles, con la tecnología como aliada.